Picture credit score: Jesse Johnson-USA TODAY Sports activities
Traducido por Marco Gámez
Esta temporada hubo un deliciosamente nuevo panorama en la División Este de la Liga Americana: los Orioles, los Rays y los Blue Jays en la postemporada, mientras los Yankees y los Pink Sox comieron desperdicios. Sin embargo, hubo muy poco tiempo para celebrar, porque con Tampa y Toronto clasificando en rol de comodines, su destino en los playoffs se determinaría en sólo un par de días.
Ambos quedaron fuera.
En Baltimore, los pájaros cantan, pero en Toronto los puedes empujar con un palo. ¿Su asesino? Quizás John Schneider, el mánager que sacó a Jose Berríos después de 47 lanzamientos. Tal vez fue el nerd analítico, que se subió los lentes hasta la nariz, quien, de antemano, le dijo a Schneider exactamente cuándo sacar a Berríos, independientemente de lo que estuviera sucediendo en el juego (este ecléctico personaje se vuelve cada vez más el villano inepto con cada recuento). Quizás, de nuevo, fue Schneider, por escucharlo.
Quizás fue Yusei Kikuchi por permitir un roletazo productor a Carlos Correa luego de heredar un corredor y llenar las bases con una base por bolas y un sencillo. Quizás fue Matt Chapman, por casi batear un further base con las bases llenas que terminó siendo un foul y luego batear roletazo para doble matanza. Quizás fue Vlad Guerrero, Jr. por ser sorprendido en segunda base, con dos corredores en posición de anotar, en el quinto episodio.
Probablemente fue ese.
Tal vez fueron algunos granjeros trastornados del siglo XIX por inventar el béisbol, tal vez fue la Liga Americana por expandirse a Toronto, tal vez fue el primer pez prehistórico por salir del mar. Los Blue Jays tienen muchos culpables, pero lo único que importa es que perdieron. La culpa es sólo el subproducto pure de imaginar un resultado diferente.
Batearon .256 con un OPS de .745 en situación de tener corredores en posición anotadora durante la temporada common, lo que les permitió ser quintos y sextos en la Liga Americana, respectivamente. Un par de derrotas por dos carreras parece mucho para un equipo con tantos bateadores. Pero tuvieron un combinado de 14-3 con corredores en posición de anotar en ambos juegos del Comodín, por lo que llamarlos “bateadores” puede ser un poco generoso.
Una de las dos carreras que anotaron los Twins en el segundo juego llegó con una doble matanza.
Construidos para triturar, nunca aprovecharon completamente la celda de energía con la que estaban equipados. Hicieron cosas como aplastar a los Rays 20-1 en una noche en la que cinco jugadores en la alineación tuvieron al menos tres hits y anotaron nueve carreras contra la brigada del tiempo basura de Tampa en la última entrada. Pero la temida etiqueta de “inconsistencia” los golpeó a mitad de año, y como un espectáculo de fuegos artificiales que estallan, accidentalmente, todos a la vez, a veces parecían explosivos, pero nunca duró mucho tiempo, y luego volvían a ser un aburrido cielo vacío. Una barrida de cuatro juegos a manos de los Rangers en septiembre los vio superados 35-9 en los marcadores y perdieron el management de un lugar en los playoffs. Luego ganaron cinco juegos seguidos, incluidos un par de triunfos en el último turno al bate, y terminaron el mes con marca de 16-11.
Debido a su plantilla completa y talentosa, no había una posición clara en la que buscar ayuda en la fecha límite de cambios, solo la opción clara y recomendable de agregar más con la esperanza de que apareciera la pieza correcta y colocara a los demás en su lugar. Eran un grupo de personas de bajo rendimiento que iban a resolverlo en cualquier momento, lo cual es una manera difícil de encontrar el éxito cuando los días pasan. En julio, estaban a sólo una buena racha de distancia. Ahora tendrán que esperar hasta la primavera.
El pitcheo ayudó, a pesar de algunas dificultades. Hyun-Jin Ryu regresó de la cirugía Tommy John y terminó fuera de la plantilla para la Serie de Comodines. Alek Manoah period visto como candidato al Cy Younger antes de la temporada. Al last, no había lanzado durante más de un mes, fue bajado a las ligas menores dos veces y se decía que lo iban a examinar para determinar el alcance del daño en su rodilla, espalda y cuádriceps derecho. Pero, con Kevin Gausman y José Berríos en el montículo para la Serie de Comodines, Toronto estaba bastante preparado en cuanto a lanzadores se refiere, y cuando Gausman se metió en problemas, los cinco relevistas que lo siguieron lanzaron cuatro entradas en blanco.
Fue la ofensiva, que encontró cierta consistencia, pero no la adecuada, la que los dejó colgados, anotando una carrera en dos juegos a pesar de superar en hits a los Twins 15 a 12. Esto fue un reflejo de su temporada en su conjunto: Guerrero tuvo un buen año, consistente, pero por debajo de su increíble campaña en 2021. Alejandro Kirk se vino abajo ofensivamente y fue reemplazado por Danny Jansen, quien luego se lastimó. Excluyendo la temporada de 2020, Matt Chapman tuvo el complete de jonrones de temporada completa más bajo de su carrera (17). Cuando Sonny Grey sorprendió a Guerrero con Bo Bichette en el plato, los Blue Jays vieron cómo su impulso ofensivo más fuerte se convertía en Guerrero aferrándose a la base, rogando porque la repetición lo librara del castigo. No lo entendió.
Y si. Schneider sacó a Berríos luego de 47 lanzamientos.
Schneider dijo que period parte del plan y que Berríos sabía que period una posibilidad. Se ha dicho que este plan “fue un tiro por la culata”, pero eso sólo sucede cuando aprietas el gatillo. En este caso pareció, más bien, volver a enfundar el arma.
Cuando recuerden esta serie será por lo de Berríos. Así como Craig Kimbrel esperando que Fredi Gonzalez le diera la pelota en en 2013; al igual que Zack Britton pensando lo mismo sobre Buck Showalter en 2016. La última imagen de la temporada será del lanzador que debería haber estado allí…sin estar allí.
Ahora han intercambiado lugares con los Twins. La famosa racha de derrotas de postemporada de Minnesota terminó el martes con una victoria por 3-1 sobre los Blue Jays y su nueva racha de victorias en postemporada aumentó a dos el miércoles eliminando a su rival, 2-0. Los Blue Jays ahora tienen una racha de seis derrotas consecutivas en postemporada y no han ganado ni un solo juego de playoffs con Guerrero y Bichette.
Pregúntenle a los Twins; esos números aumentan mucho más rápido de lo que piensas.
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